EL SENTIDO DE LA NAVIDAD
Las panderetas, el espumillón, el árbol de Navidad, los turrones, los mantecados, sin duda está aquí la Navidad. Llevamos ya mas de un mes ojeando la revista de juguetes con nuestros hijos que entusiasmados lo piden todo. Las madres , atareadas con el disfraz de nuestros pequeños, que este año no van de pastores, si no de estrella!!!!, menos mal, que hay madres hábiles en la costura. Y es que, es una época del año para los niños, para estar en familia, para los encuentros con amigos……muchos nos los vemos desde el año pasado.
Y preparando mis clases extraescolares de Inteligencia Emocional con mis niños, me pregunte por el origen de la Navidad? Sabéis cuál es?.
Los Romanos, festejaban en esta época el nacimiento de Apolo, el Sol invicto. El origen de estas fechas está en la celebración del Solsticio de invierno: Los Griegos esperaban la llegada de Helios; los Egipcios de Morus y los Persas la llegada de Mitras. El origen de estas fiestas está en la celebración del solsticio de invierno, común a muchas culturas, y para los Cristianos el nacimiento de Jesús.
Es una época donde tenemos muchos símbolos: el árbol de Navidad y Papa Noel de uso universal, el pesebre y el portal de Belén para los cristianos. El roscón de reyes para los golosos, los adornos de las casas, la decoración de las tiendas, etc. El 28 de Diciembre es el día de los Santos Inocentes, y se hacen bromas y el sentido del humor está presente en las calles, hasta en las noticias de la TV.
Es una época para estar en familia. Para reencontrarnos, y poner sobre la mesa, el plato principal, el RESPETO, saborearlo, digerirlo y aceptarlo. Dejar a un lado, el pasado, los malos tiempos, la culpa y el orgullo. Es una época donde el AMOR lo puede todo. El amor de una madre por su hijo, el amor entre hermanos, entre cuñados. Donde queremos sembrar los deseos de paz para toda la familia.
El sentido de los regalos es sentirnos queridos, disfrutar de la familia, que ilusionados abren los envoltorios para ver qué es. Los regalos, es un momento para dar gracias de todo lo que ya tienes, de todo lo que ya eres. Y si este año no hay regalos, date las gracias por compartir con los tuyos momentos en familia, las sonrisas de tus mayores que una año más te acompañan, la mirada inocente y emocionada de los más pequeños que ven que son días especiales, llenos de ternura, cariño, amor, protección, lo único que necesitan para desarrollar su personalidad triunfante.
Porque comprar, es compartir, es agradar, es servir al otro en todo lo que puedas para hacerle feliz. Y si no se puede comprar, pinta, escribe, cocina, abraza, lee, sonríe, juega, disfruta. Se puede compartir una buena peli, unas palomitas, una canción, un baile. Siempre hay algo que puedes dar al otro. Recuerda, todo lo que das vuelve a ti.
Es una época para dar y recibir. La Navidad es un Estado Anímico, es un “manto protector”, donde los valores de amor, ternura, paz y respeto se cocinan a fuego lento, con una canción melodiosa, para servirlas de manos del Corazón.
FELIZ NAVIDAD!
