EL OBSERVADOR QUE SOMOS

Descubrir que cada uno de las personas que habitamos este mundo somos diferentes me abrió los ojos a la libertad. Si , a la libertad de identificar, reconocer y aceptar que somos distintos. ¿Y cómo pude estar cegada tanto tiempo?. Confieso que aun, en algunos momentos, mis viejos mapas mentales me juegan malas pasadas.

Fijaros, en función del observador que somos, nuestra forma de interpretar, de ver, de mirar es distinta; Cada uno de nosotros que hemos nacidos en lugares y dentro de  familias diferentes (algunos hijos únicos, otros dentro de una familia numerosa; padres separados o no…); Cada uno de nosotros creció en un entorno particular: colegios, barrios, amigos…); Tenemos profesiones y hobbys concretos. Algunos hemos realizado este camino de vida con baches, otros con obstáculos y algunos inmersos en profundas guerras ;  TODOS SOMOS DISTINTOS, ÚNICOS Y EXTRAORDINARIOS.

Y es que en función de nuestras experiencias, de nuestros retos, de las relaciones personales que hemos tenido;  de los éxitos y errores que hemos experimentado; de  nuestras ilusiones, decepciones, frustraciones, alegrías y/o tristezas, SOMOS OBSERVADORES diferentes. Y ese vivir efectivo, lo reducimos en creencias, opiniones, hábitos, etc…Y Jose Antonio Marina, nos recuerda que todas estas experiencias: palabras, emociones, creencias, ideas, opiniones, las guardamos en la Inteligencia Generadora: que es una enorme despensa donde todo queda bien guardado, a la espera de que la Inteligencia ejecutiva, evalúe, decida y ejecute que palabra, que opinión, que creencia, “nos sirve” para responder y adaptarnos a la realidad que veo y experimento.

Nos cuentan los neurocientíficos, que esta gran despensa supone solo el 5% de nuestras desarrollo cerebral, de nuestras posibilidades. Que el 95% restante, reside en el inconsciente. Fijaros, tenemos “escondidas” maravillosas decisiones, visiones, comportamientos, soluciones. ¿Qué fuerte no?

Nos cuentan los neurocientíficos , además, que cuando estamos “viendo” (observando, mirando, viviendo), unas circunstancias, cada uno de nosotros, “distingue” lo que más se asemeja a los “productos” guardados en nuestra despensa. Así,  ante una misma realidad, podemos ver mundos diferentes.

Por eso , en Coaching decimos, que la realidad no existe. Sino que vivimos en un mundo interpretativo.

¿Qué ocurre cuando “la realidad” no coincide con los “productos” de mi despensa?

¿Habéis experimentado, cuando un día, de repente, nada fluye?

Un día mi trabajo, no tenía sentido. Me sentía fuera de aquella organización: sólo veía como “no me querían”; Tenía una relación difícil: sentía de nuevo que “no me quería”. Mis relaciones afectivas, mis amig@, no me comprendían: Yo, que siempre era la líder, la fuerte, la positiva, la que daba opciones, ¿a qué venía ahora ese derrumbe tan total?

Y desde el observador que soy ahora, recuerdo sufrimiento, tristeza, soledad, desamparo. No tenía recursos para seguir adelante, para apreciar lo bueno que me daba la vida, y lloré mucho. Estuve en el victimismo mucho tiempo.

Y hoy desde el observador que soy, repaso ese camino y distingo un primer paso:

Darme cuenta que no estaba a gusto con la vida: trabajo, pareja, amigos…..(PARAR) y reconocer que en mi despensa guardaba creencias que no me valían. (ACEPTAR LO QUE ES)

Y con presencia, con calma, con paz, y con mucho amor, (RECURSOS)  perdoné, perdone mucho, solté lo que no me valía (RESPONSABILIDAD )  y encontré mi mejor versión (conectar con buena parte de ese 95%,  y comenzar a guardar en mi despensa lo que valía realmente).

Hacerme cargo de mi misma, de mis destino , hacerme responsable de CONSTRUIR LA VIDA QUE QUIERO, es uno de mis objetivos vitales.

A los largo de mis más de 20 años de trabajo personal, he combinado técnicas : Yoga, meditación, coaching, la FE, con el claro objetivo de guardar en mi despensa ideas, pensamientos, palabras, creencias que me empoderen,  que saquen lo mejor de mi;

Aprender, entrenar, descubrir y explorar ese 95% que reside en el inconsciente es uno de mis objetivos hoy día. ¿Me voy a conformar con ser, sólo el 5% de mis posibilidades?,

EMPRESA: Quiero desarrollarme profesionalmente en una carrera de éxito; Mis errores me enseñan cada día;

EDUCATIVO: Conocerme me ayuda a afrontar situaciones difíciles.

PERSONAL:  Armonía entre lo que pienso, lo que digo, y lo que hago.

Desde ALTO RENDIMIENTO PERSONAL, combino técnicas adaptadas a cada observador. Es una camino que si bien comienza con miedo y vulnerabilidad (no me gusta quien soy, qué hago, qué tengo….), continúa con un trabajo amoroso , para CONSTRUIR LA VIDA QUE QUIERES.